Mostrando entradas con la etiqueta Literatura española. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Literatura española. Mostrar todas las entradas

martes, 10 de noviembre de 2009

José Mª Amigo Zamorano: Recordando a Eusebio García Luengo

Al recortarnos el bigote ante el espejo, un bigote blanco, nada simétrico, porque por una parte caen los pelos sumisos y por la otra se encrespan rebeldes; al recortarnos el bigote, decimos, nos hemos acordado del viejo escritor García Luengo (D. Eusebio) ¿Por qué? Bueno, porque tenía una barba de varios días que durante toda su vida se recortó él, sin que nunca fuera al barbero; Porque tenía una barba también insumisa; porque conversamos, aquí, en Las Navas del Marqués, durante más de 15 años, todos los veranos; porque sus charlas, sus palabras, sus observaciones, sus recuerdos, desembocaron, por nuestra parte, en amistad, en querencia; porque nos acordamos de él...

(Aquí hacemos un aparte; ¿nos consideraba don Eusebio García Luengo sus amigos?... No sabríamos afirmar que fuera recíproca esa amistad; aunque esto necesitaría algunas palabras mas por añadidura; veamos: nunca mostró un rechazo, la menor animadversión, ningún atisbo de malquerencia hacia nosotros, pero, a la edad que lo conocimos, ya con 80 años, alejado de la vida literaria y después de haber luchado tanto, vivido tanto, haber conocido a tantas personas, ser de verbo fácil, pues le gustaba hablar... no podríamos asegurar asegurar, rotundamente, que nos tuviera por amigos... sería muy arriesgado declararlo. Creemos que si. Y muestras contrarias no tenemos. Pero, como hijos de campesinos, tímidos como el propio D. Eusebio y rencos además, que se le va a hacer la culpa fue de la poliomielitis, somos desconfiados. Y de todas maneras ya no lo podremos averiguar si nos tenía por amigos, no podremos preguntárselo pues murió en el 2003 a los 93 años de edad. Dulcemente, al parecer. En la cama, de su casa de la calle Ibiza de Madrid. Y además hubiéra sido inútil, pues tenía tantas conchas o más que los galápagos, y como él decía, era tan cobarde que para no tener un enemigo más, se habría envuelto en palabras de las que no se iba a salir nunca, ¡jamás!, lo asediaras por donde lo asediases. Sin embargo, alguna consideración si que debió de tener con nosotros, aunque solo fuera porque le hicimos varios homenajes, uno con categoría de nacional, a su labor literaria y nunca, jamás, mostró rechazo alguno a estos propósitos nuestros.

Como él decía, lo dimos a conocer.
.
-Me has hecho popular.
.
En esas palabras había cierta verdad y mucha ironía, ya que estaba harto de que lo conocieran. En toda España. Pero, si, efectivamente, lo presentamos ante un numeroso público de veraneantes y gentes naveras, quienes, sorprendidos, descubrían que bajo la apariencia de un mendigo se escondía un hombre sabio, culto, de conversación agradable y fluida, sugestiva y atrayente.

Decíamos, apariencia de mendigo, o vagabundo, o pordiosero... Y si, la tenía. Cuerpo delgado, encorbado, con cayado, cara amojamada, con barba de varios días, cada pelo por su parte, cabello blanco, gorra de plato, ropas demasiado amplias, como de prestado, unos zapatos largos, desgastados, sin lustrar, demasiado grandes para él, quizás. Todo llevaba a la conclusión de que estábamos ante un pobre de solemnidad. Si a eso le añadimos las manchas en la pechera, o en otras partes del cuerpo, corroboraba aun más esa primera impresión. Hasta él nos dijo que, una vez, le dieron unas monedas como limosna. Y como viera que por mucha explicación que les dio los que depositaron la limosna no parecían escucharlo... se guardó 'las perras' y siguió andando.

Esa apariencia de mendigo, o vagabundo, o desarrapado, o... o también marginado, desvalido, débil, indefenso... llevaba a ciertas personas a acercase a él con ánimo conmiserativo. Nos contaba, al respecto, que, la calle Ibiza, donde tenía su residencia habitual, tiene un bulevard al que acudía muy a menudo sentándose, muchos ratos, en los bancos de ese paseo. A gastar el tiempo y a ver 'pasar al personal, como dicen en Madrid'. Explicaba sus numerosos paseos por la calle porque padecía de claustrofobia...
Bueno, sigamos con lo que les queríamos contar: se dio cuenta de que hacía varios días una señora, al pasar cerca del banco donde estaba sentado, lo miraba con cierto interés. Y ya, un día, se acercó interesándose por él: que de dónde era, que si se encontraba solo, que si necesitaba ayuda... D. Eusebio García Luengo, muy amable, le contestó que no, que no se encontraba solo, que vivía con un hijo y que más allá, y don Eusebio le señaló en una dirección de la calle Ibiza, vivía otro hijo, que no, que no era madrileño, que era de Puebla de Alcocer, un pueblo extremeño de la provincia de Badajoz, pero que llevaba viviendo en Madrid muchísimos años.

-Y vivo, ahí, en frente. Ahí vivo. Ahí tiene usted su casa, señora. Verá usted, si salgo fuera, a la calle, si me ve usted, aquí, tan a menudo, es porque padezco de claustrofobia.

La señora lo miró e hizo un gesto extraño.

-¿Padece usted de claustrofobia?...
.
-Si, señora. Soy claustrofóbico
.
La señora se fue separando poco a poco del escritor y...
.
-'Juyó'. 'Juyó' como alma que lleva el diablo... -nos decía Don Eusebio- ¿Qué pensaría esa buena mujer acerca de la 'claustrofobia?... Y si, reconozco 'mi torpe aliño indumentario', dicho con palabras de Machado (D. Antonio) Pero... solo ahora; antes... antes yo era muy elegante, distinguido y señorito. Modesto, pero señorito.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Fanny Rubio Gamez en Caminar Conociendo

Tomado de:

http://www.catedramdelibes.com/archivos/001238.html

Fanny RUBIO GAMEZ

Nació en 1949 en Linares (Jaén). Doctora en Filología Románica, ha sido profesora en la Universidad de Granada y en la Universidad Complutense de Madrid. Además de escritora, como excelente estudiosa de la literatura se ha dedicado fundamentalmente a la poesía española contemporánea y ha publicado antologías como Poesía española contemporánea, estudios (Las revistas poéticas españolas (1939-1975), por ejemplo) y también artículos en prestigiosas revistas científicas (Ínsula, Revista de Occidente, Cuadernos hispanoamericanos, etc.). En el campo de la creación literaria, ha cultivado la poesía, la novela y el cuento, obteniendo en todos los géneros una buena acogida por parte de la crítica y los lectores. Actualmente es, desde el año 2006, la directora del Instituto Cervantes en Roma.

-POESÍA
Primeros poemas (1966).
Acribillado amor (incluido en el libro colectivo Poemas) (1970).
Retracciones (1979).
Reverso (1988).
Retracciones y reverso (1989).
Dresde (1990).
En Re menor (1990).

-NARRATIVA
"A Madrid por capricho" (publicado como libro) (1988). Relato.
La sal del chocolate (1992). Novela.
"Ja-Li" (en la revista Caminar conociendo, Las Navas del Marqués - Avila) (1993). Relato.
La casa del halcón (1995). Novela.
"Vertical" (incluido en las antologías de relatos El libro negro de Madrid, 1995, y Mujeres al alba, 1999). Relato.
El dios dormido (1998). Novela.
"Clara se moja por primera vez" (publicado en el diario El Mundo) (1998). Relato.
"Una razón de amor" (incluido en la antología de relatos Vidas de mujer) (1998). Relato.
"La Brisa" (incluido en la antología de relatos De Madrid al cielo) (2000). Relato.
El hijo del aire (2001). Novela.
"¡Goool!" (incluido en la antología de relatos La risa y la sonrisa) (2001). Relato.
Fuegos de invierno bajo los puentes de Madrid (2006). Libro de relatos.


1967: Premio "Ciudad de Jaen" con Primeros poemas.
1970: Premio de Poesía Universidad Complutense con Acribillado amor
2007: Premio Ideal de Cultura por su trayectoria como escritora.

VUELVE EL MIRAR

Vuelve el mirar a la ciudad marina: Sus columnas tendidas del crepúsculo, sus niños en el patio de butacas, en círculo su mar, aliento húmedo del soportal en el poniente.

Vuelve el mirar, ya en el límite azul del tiempo huido, al manso arrullo que adivina el sueño. Vuelve tu voz a la memoria, la dulce lengua de templado fuego

y en el cristal del amoroso lance ("plastificamos en el acto") vuelve nuestro perfil hacia la calle del Verdigón, atados a la luz a mano armada.

(De Retracciones)


VENUS DORMIDA (II)

Sabes, amor, el fuste a veces falla.
La moldura derecha queda un poquito baja.
No lograré sobreponerme delante del desfile.

Intenta por lo menos
que las abrazaderas se mantengan,
-sabes amor- que parezca la grava
arena de los mares
y este toral un "locus amoenus".

Estaremos tranquilos así, mientras asiste la inspección.

Y es que, ocurre, mi amor, que estos diez dedos
no están para manitas
ni este pinchazo pectoral va a poder entonar el "Misa est".
Mejor pensamos la Elegía.

No obstante, aunque la cosa es más bien chunga,
haré lo subjuntivo porque esta gárgola responda,
por lo menos, hasta el yogourt,
porque, por algo, amor, estamos a la última.

(De Dresde)

Mientras tanto, Alejandra se había ofrecido en aquellos meses de parón laboral en la revista Ajoblanco como "investigadora para casos difíciles", y apenas logró una oferta en "detectives matrimoniales". En horas de baja autoestima, dada su pésima experiencia con los hombres, se preguntaba por qué no transformar el anuncio de "investigadora" por el de "psicóloga para polvos difíciles".
Cuando una voz de hombre la llamó por teléfono y remitió al anuncio de la revista Ajoblanco, Tena creyó que era Ciro diciendo "te añoro" cuando lo que pronunció el comunicante fue "señora".
-Ciro.
-Perdone, señora, me ha confundío -manifestó un hombre de fuerte acento nerudiano-. He visto su anuncio y veo que vive cerca de donde estoy yo. La llamo porque tengo un conflicto vital.
-Cobro cinco mil por hora, como un profesor de medio pelo. ¿Se encuentra mal?
-No necesito médico.
-¿Ni puta?
-Por favor, señora, necesito a un profesional como usted. El mío es un caso difícil que me tiene comía la salud.
-De acuerdo. ¿Dónde quedamos?
-En la gasolinera de Galapagar, cerca no hay bares, ¿en una hora?, por favor.
El hombre parecía el típico macho con la bragueta preparada con el ahora o nunca.
-Tan rápido es diez mil. Usted me parte la tarde, sépalo.
Alejandra introdujo en el bolso un aerosol de autodefensa y tomó el coche. En pocos minutos aparcó y tuvo enfrente al hombre. Calculó a media distancia su edad, aproximadamente cincuenta y tantos o más, aspecto de casado en crisis por las arrugas, o casado en viaje de trabajo, erotismo peliculero, caderonas, dificultades de respiración.
(De El hijo del aire, Barcelona, Planeta, 2001, pp. 157-158)


BRAVO, María Elena, "María Magdalena y la literatura. Reflexiones sobre El dios dormido de Fanny Rubio", en Monographic Review, núm. 19 (The "nueva novela histórica" in Hispanic Literature), 2003, pp. 28-48.

CAÑAS, Dionisio, "Heteromorfia poética y afirmación del sujeto posmoderno en Dresde, de Fanny Rubio", en Ínsula, núm. 546, 1992, pp. 24-25.

FERRADÁNS, Carmela, "Articulaciones urbanas en el discurso poético de Fanny Rubio", en Hispanófila, núm. 128, 2000 , pp. 37-48.

GALÁN, Soledad, "Fanny Rubio. La memoria de la desmemoria" (entrevista), en Meridiam, núm. 24, primer trimestre año 2002, pp. 6-12.

RUBIO, Fanny, “Escritura de El dios dormido”, Enrique Baena (coord.), Escribir mujer. Narradoras españolas hoy, Málaga, AEDILE, 2000, pp. 71-78.

RUIZ CALVENTE, María, "Una escritora española: Fanny Rubio (aproximación a su obra)", en Elucidario: Seminario bio-bibliográfico Manuel Caballero Venzalá, núm. 3, 2007, pp. 233-240
(disponible en http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2523187).

Página principal de la autora:
http://personal.telefonica.terra.es/web/fanny-rubio/
(contiene el cuento "Bab-Bujlud", perteneciente a Fuegos de invierno bajo los puentes de Madrid)
http://www.eltercernombre.es/code/getpdf.php?id=29
(fragmento de Fuegos de invierno bajo los puentes de Madrid)

Reseñas sobre sus textos:
http://www.elpais.com/articulo/cultura/RUBIO/_FANNY/realidad/hace/perder/vocabulario/elpepicul/19950520elpepicul_3/Tes/
(sobre La casa del halcón)
(sobre El hijo del aire)
(sobre Fuegos de invierno bajo los puentes de Madrid)

jueves, 29 de octubre de 2009

Celso Emilio Ferreiro: El Patriarca

Celso Emilio Ferreiro: El Patriarca

*

El pueblo se hizo en él luz armoniosa
y lenta melodía para darnos
la dimensión exacta del camino,
del viento trashumante y los crepúsculos,
de las tardes profundas
y de las noches cóncavas
que miden la andadura de la historia.

Guardad silencio
y descubríos.
Estáis en presencia
de la palabra.

*

Poesía Libre. Revista de Poesía. Ministerio de Cultura, Managua (Nicaragua) Años IV. Número 10, enero de 1984.

Responsable: julio Valle-Castillo

Consejo Editorial:

Carlos Calero (Monimbó); Juan Ramón Falcón (Condega); Marvin Ríos (Niquinohomo); Cony Pacheco (Subtiava); Gonzalo Martínez (Bluefields); Gerardo Gadea (Ejército Popular Sandinista)

jueves, 23 de julio de 2009

Celso Emilio Ferreiro: Epitafio sin sepulcro

Celso Emilio Ferreiro: Epitafio sin sepulcro

Existen monumentos al soldado desconocido
pero nadie se ha acordado del campesino desconocido
que labra la tierra en el campo
donde nació el soldado desconocido,
ni del obrero desconocido que construyó la casa
donde vivió el soldado desconocido,
ni la madre desconocida que parió un niño
que más tarde llegó a ser soldado desconocido,
ni del poeta que muriéndose de asco
canta para que en el mundo no ezxistan
soldados desconocidos
ni tampoco conocidos.

*
Revista 'Poesía libre'. Ministerio de Cultura (Managua, Nicaragua) Año IV, número 10, enero de 1984

viernes, 26 de diciembre de 2008

Agustín García Calvo: Cinco inéditos (a)

El primer número de 'La Borrachería, cuadernos poéticos' se rotula así: "AGUSTÍN GARCÍA CALVO. Cinco inéditos". Edita Lucerna y patrocina el Café-Bar Aureto. Y tras la portada viene este brindis:

'Vaya en agradecimiento, desde La Borrachería, un brindis de homenaje a la amistad y a la obra de Agustín García Calvo, para que sus versos, como buen vino, nos empapen siempre la vida'

Y firma Aurelio que, suponemos, será el dueño del Café-Bar Aureto.

Y el librito aclara en su última cara:

'Este primer número de LA BORRACHERIA dejó de ser de Agustín para ser de todos el día 1 de mayo de 1997. Es edición única y numerada.

La que nosotros tenemos señala que es la '024/400'.

Para ser fieles a lo dicho de que dejan de ser del autor para ser de todos los demás les ofrecemos estos 5 (cinco) inéditos; inéditos antaño, claro.

Los publicamos en este blog 'Caminar conociendo' porque el autor colaboró gratuitamente con la revista 'Caminar conociendo'. Aquí tienen el primero de los poemas:

(a)

DEL DRAMA BARAJA DEL REY DON PEDRO
CANTO DEL CORO PARA 'REY DE ESPADAS'

Un día cayó
de su cielo la luna;
de canto chocó
contra peña desnuda,
y en dos se quebró,
como espejo de viuda,
que con un ojo llorá al amor que perdió
y con el otro
nuevo amor busca.

Así se partió,
viva plata de dudas;
porque es que son dos
y una es cada una.
Con eso empezó
largo siglo de luchas,
dos buídos alfanjes que en rabia de amor
uno con otro
doblan y cruzan.

La guerra se abrió:
no se cierra ya nunca;
que el reino de Dios
late en esa disputa:
qque tú eres yo,
pero no te confundas,
que eres otro, y por eso yo soy el que soy,
que yo me hago
en contra tuya.

Ya el bronce sonó;
ya la espada relumbra.
Si tú o si yo,
la batalla lo juzga.
No puede ser, no,
reyes dos a la una.
Solo rey es la guerra y es padre de todos;
nos hace ser
y nos anula.

(seguirá en otra entrega)

viernes, 1 de febrero de 2008

Antonio Machado: 'En la miseria lenta del camino'

En la miseria lenta del camino
la hora florida, brota,
de tu amor, como espino solitario
del valle humilde a la revuelta umbrosa.
El salmo verdadero
de tenue voz hoy torna
lento a mi corazón y da a mis labios
la palabra quebrada y temblorosa.
Mis viejos mares duermen; se apagaron
sus espumas sonoras
sobre la playa estéril. La borrasca
camina lejos en la nube torva.
Vuelve la paz al cielo;
la brisa tutelar esparce aromas
otra vez sobre el campo, y aparece
en la bendita soledad tu sombra.

Antonio MACHADO (DEL CAMINO)

miércoles, 2 de enero de 2008

Jacinto Herrero Esteban: Iniciación al sueño

Esas nubes de frío, no de agua
teñidas de carmín, los alocados
vuelos y gritos de estorninos grises
que disputan su espacio entre los árboles
para dormir; los perros vagabundos
que señalan su propio territorio
de esquina a esquina; niños que juegan
ajenos a la luz atardecida;
ventanas que se encienden de amarillo
claror. Una tibieza oscura en casa
le recibe. No intentes saber nada.
Si oyeses fuera pasos en la noche
y voces que atraviesan el silencio,
trata en la calma de salvar tus sueños.

Feliz Navidad 2007

Jacinto Herrero Esteban

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Lope de Vega: Soneto XXXI

Albania yace aquí, Fabio suspira,
matola un parto sin razón, dejando
la envidia alegre y el amor llorando,
pues ya cualquiera fuerza le retira.

El Tajo crece por mostrar su ira
y corre de la muerte murmurando:
párase el sol, el túmulo mirando,
temiendo en sí, lo que en Albania mira.

Mas él, si se eclipsara, volver puede,
y Albania no, que de volver ajeno
a Fabio deja en el postrero parto.

Venganza fue para que ejemplo quede
que quien basilisco en dar veneno,
muriese como víbora en el parto.

Lope de Vega

miércoles, 17 de octubre de 2007

Teresa de Ahumada, 'La Santa'

¡Ay! ¡Que larga es esta vida!
¡Qué duros estos destierros,
esta cárcel, estos hierros
en que el alma está metida!
Solo esperar la salida
me cansa un dolor tan fiero,
que muero porque no muero!

Teresa de Ahumada

martes, 7 de agosto de 2007

José Mª Amigo Zamorano: Concha Barbero de Dompablo, camino de la armonía

Una regla científica es sin duda lo que mejor define el libro que vamos a comentar: los cambios cuantitativos conducen a transformaciones cualitativas. Al fin y al cabo es lo que nos viene a contar Concha Barbero de Dompablo. La cual, en su libro, Palabras para el Bienestar (Un camino hacia la armonía y la plenitud vital), que así se rotula el viaje emprendido, hacia ese estado de felicidad, por la autora. Lo inicia con la pregunta "¿Eres feliz?". Una interrogación necesaria que indica de manera transparente, sin engaños, sin subterfugios, que si la respuesta es afirmativa no es necesario adentrarse en las procelosas aguas de su trayectoria. En cambio, si la respuesta que se da es negativa, adquieren relevancia las Palabras para el Bienestar que han de conducir, irremediablemente, al capítulo último: "Vives el ahora. Te encuentras con tu ser".

Pero, que nadie se llame a engaño con eso de utilizar el vocablo 'Palabra', pues no se trata de un hablar por hablar, pura palabrería, no; es, en realidad, la experiencia de la autora con el fin de llenar de contenido su vacío... aunque 'vacío', para ser exactos, no es la palabra adecuada... mas bien de llenarse de otra manera, porque, en puridad, nadie está vacío absolutamente; nadie, nunca, está en pura cáscara...

En fin, lo que la autora necesita es un cambio, un cambio de personalidad, para una transformación, si cabe, del mundo: un mundo que no le gusta y nos lo repite varias veces. Empero que algun@s no se pongan en guardia, a la defensiva, su experiencia vital no va en la dirección de poner patas arriba la estructura y superestructura de la sociedad en la que viven... tan a gustito, no: en absoluto; aunque, bien mirado, si se consigue acceder a ese estadio, el mundo marcharía mucho mejor.

Para esa transformación de ella, de Concha Barbero, es imprescindible arribar a un conocimiento cabal de ella misma, como recomendaba Sócrates con su imperiosa exclamación "¡Conócete a ti mismo!".

Y es aquí donde comienza su viaje, no exento de dificultades, de trampas, de vericuetos que tiene nuestro ser, labrado a lo largo de muchos años, y semejantes, a veces, de callejones sin salida que, solo, la voluntad de la autora consigue traspasar.

Poco a poco va consiguiendo salvar vaches sin cuento, aunque, hay que decirlo todo, no es, en modo alguno, un camino erizado de espinas, ascético, se recomienda no tomárselo a la tremenda; es decir: sin traumas, sin estridencias, sin alaridos... un periplo en derredor de ella misma: limpiando impurezas, arrancando rebabas, desechando vanalidades, apartando lugares comunes, arrinconando contradicciones muy arraigadas en el común de las gentes... Un día, de repente, se notará otra, siendo ella misma. Un paso más allá y las pequeñas estupideces desaparecen, la insustancialidad se volatiliza, la ironía nace, el buen humor se impone. Ella ha cambiado y con ella el entorno, que la envuelve, la arropa, la cubre, la encastilla.

Por eso decíamos al principio que la cantidad deviene en cualidad.

Ya ha llegado al 'Vivir el ahora. Se encuentra con su ser'. Entonces grita, grita de alegría, se emociona, salta, ríe y, sin importarle el qué diran, se pone a bailar sin ton ni son, porque le apetece... Ella es feliz. El mundo es feliz: ha llegado a la Armonía y a la Plenitud Vital y colorín colorado...

Pero no, no es un cuento, es camino para librarnos de contradicciones que se nos adhieren pegajosamente al ser como una lapa; camino para adquirir la coherencia precisa para andar por el mundo con dignidad. Tal vez no nos convenza este modo de ver la realidad, pero es indudable que para ser felices, primero y principalmente, hay conocerse a uno mismo. Este libro nos coloca en el buen sendero.

Lean el libro de Concha Barbero. Además está muy bien escrito. Con palabras llanas. "Llaneza muchacho que toda afectación es mala", nos aconsejaba Cervantes. Pues eso, libro llano. Rara avis en uno primerizo como es este de Concha Barbero de Dompablo.


viernes, 20 de abril de 2007

Luis Izquierdo: 'Supervivencias'

No es país para el sueño a la deriva
ni para devanar recuerdos
no hay dársena tampoco ni señales
no hay país para embarcar
no hay faros ni añoranzas todo es norte
y se declaran las conciencias marquesinas,
simétricamente embarrando caras tristes
que se alejan hasta luego
y no hay caminos.

Luis Izquierdo

miércoles, 18 de abril de 2007

Anónimo

Pues que en esta tierra
no tengo amor,
aires de la mía
llévame al albor.

Anónimo
(Lírica Tradicional)

domingo, 25 de marzo de 2007

'Camino al andar': Antonio Machado




Camino al andar


Al andar se hace camino,


y al volver la vista atrás


se ve la senda que nunca


se ha de volver a pisar.


Caminante no hay camino,


sino estelas en la mar.


Antonio Machado

lunes, 12 de marzo de 2007

RIMA VII - BECQUER


¡CUANTA NOTA DORMÍA EN SUS CUERDAS,

COMO EL PÁJARO DUERME EN LAS RAMAS,

ESPERANDO LA MANO DE NIEVE

QUE SABE ARRANCARLAS!


BECQUER

miércoles, 3 de enero de 2007

Romances de Gerinendo y Delgadina

ROMANCES DE GERINELDO Y DELGADINA

Gerineldo

Gerineldo, Gerineldo.
Gerineldito pulido,
Quién te pillara esta noche
Tres horas a mi albedrío.
--Como soy vuestro criado,
señora, burláis conmigo.
--No me burlo, Gerineldo,
que de veras te lo digo.
--¿A qué hora, gran señora,
me vengo a lo prometido?
--Entre las doce y la una,
cuando el rey esté dormido.
A eso de la media noche
Al cuarto la infanta ha ido.
Se quitó las zapatillas
Para así no formar ruido.
Se ha levantado la infanta
Y en su cuarto lo ha metido.
Se pusieron a luchar
Como mujer y marido.
Competraron tan bien
Que se han quedado dormidos.
El rey que estaba en sospecha
Al cuarto la infanta ha ido
Y los ha visto a los dos
Como mujer y marido.
--No te mato, Gerineldo,
que te crié desde niño.
Si mato a la infanta
Quedará el reino perdido.
Os pondré en vuestro palacio
Como mujer y marido.
Y aquí les dejo la espada
Que les sirva de testigo.
Se ha levantado la infanta
Tres horas el sol tendido.
--Levántate, Gerineldo,
mira que estamos perdidos
que la espada de mi padre
con nosotros ha dormido.
--¿Adónde me iré yo ahora
para que no sea prendido?
--Vete por esos jardines
cortando rosas y lirios.
El rey que estaba en sospecha
A Gerineldo ha salido.
--¿Qué te pasa Gerineldo
que estás tan descolorido?
--Vengo por estos jardines
cortando rosas y lirios.
El olor de la azucena
Los colores me comido.
--No me niegues Gerineldo
que con la infanta has dormido.
--No lo niego, mi señor,
aunque me de gran castigo.
--El castigo que os daré
ya lo tenéis prometido:
que os marchéis a casa aparte
como mujer y marido.
--Tengo mi palabra dada
por el Cristo de la estrella.
Mujer que conquista a un hombre
El no casarme con ella.

(*DICE EL PIE DEL ROMANCE: AGRADECEMOS A DOÑA TERESA ALVAREZ LOPEZ, QUE NOS PROPORCIONÓ EL CASSETE JUNTO CON D. FRANCISCO GARCIA SEGOVIA. REVISÓ LA LETRA D. SANTIAGO ROBLEDO QUE CANTA EL ROMANCE. TODOS ELLOS NAVEROS. PUSO LA MÚSICA DOÑA LOLA DE CEA RAPP, PROFESORA DE MUSICA.)

(Aparecido en el número 3 de la revista 'Caminar conociendo')

ROMANCE DE DELGADINA
(Según la versión de Doña Julia Haro López de San Bartolomé de Pinares que la aprendió siendo niña de su madre y de sus tías)

Delgadina

Un rey tenía tres hijas,
Tres hijas como la plata.
La más pequeña de ellas
Delgadina se llamaba.
Un día estando a la mesa
Su padre la remiraba.
--¿Qué me miras, padre mío,
que me miras a la cara?
--Te miro una cosa hija
que has de ser mi enamorada.
--No lo querrá Dios del cielo
ni la Virgen soberana
que mi madre sea suegra
y mis hermanas cuñadas.
--Alto, alto, mis criadas,
a Delgadina matarla.
Y si no la queréis matar,
Encerrarla en una sala.
No la deis de beber,
Ni tampoco de comer
Mas que un poco de agua turbia
Y una sardina salada.
Han pasado siete días.
Asomada a una ventana
Ha visto a sus hermanitas
Bordando juegos de plata.
--Hermanas, si sois hermanas
Darme una jarra de agua,
Mas de sed que no de hambre
A Dios entrego mi alma.
--Retírate Delgadina,
Delgadina desgraciada,
si mi padre lo supiera
la cabeza nos cortara.
Delgadina se retira
Triste y desconsolada.
Con lágrimas en los ojos
Iba regando la sala.
Han pasado siete días.
Se ha asomado a otra ventana.
Ha visto a su tierna madre
Peinando sus bellas canas.
--Madre, si usted es mi madre,
deme una jarra de agua,
mas de sed que no de hambre
a Dios entrego mi alma.
--Retírate Delgadina,
Delgadina desgraciada,
que por ti no como en mesa
ni tampoco duermo en cama.
Delgadina se retira
Triste y desconsolada.
Con lágrimas en los ojos
Iba regando la sala.
Han pasado siete días.
Se ha asomado a otra ventana
Y allí estaba su padre.
--Padre, si usted es mi padre,
deme una jarra de agua,
mas de sed que no de hambre
a Dios entrego mi alma.
--Hija yo te lo daré
si tu cumples mi palabra.
--Padre yo la cumpliré
aunque sea de mala gana.
--Alto, alto, mis criadas,
a Delgadina agua darle;
unas con jarras de oro
y otras con jarras de plata.
A llegar a Delgadina
Ya nada le hacía falta:
Una fuente había a su lado
Y ya estaba amortajada.

(ROMANCE APARECIDO EN EL Nº 3 DE LA REVISTA 'CAMINAR CONOCIENDO')